Aprovechando los pictogramas de boardmaker elaboré unas flash-cards.
Estas tarjetas nos resultaron útiles por ejemplo cuando comenzamos con la lectura global, puesto que el dibujo que aparece le resultaba familiar y eran objetos que sabía signar.
Debajo del dibujo aparece la palabra escrita en minúsculas (en nuestro caso, porque fue así como comenzó a aprender a leer) y eso nos permitía trabajar con el mismo material con el que antes signábamos.
En otras ocasiones las utilizamos para clasificar colores, transportes, comida... O simplemente para jugar con ellas mientras reforzamos los signos o las palabras, dependiendo de cual sea la tarea en ese momento.
Cada tarjeta mide aproximadamente 15x13 cm. Las plastificamos para que fueran más duraderas y elegimos un tamaño relativamente grande para que la palabra escrita se leyera con facilidad.
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